jueves, 22 de junio de 2017

Sanciones de la AEAT por presentar 036 fuera de plazo

El modelo 036 y 037 se utiliza para comunicar a la Agencia Tributaria el alta de la actividad empresarial, las variaciones o modificaciones de la actividad o la baja censal de la empresa.

Algunas empresas ya han empezado a recibir sanciones de hasta 200€ por presentaciones fuera de plazo.

-Plazo de presentación para comunicar el alta en el censo tributario:

Antes del inicio de la actividad empresarial y antes de realizar operaciones y que comience la obligación de retener o ingresar a cuenta.

-Plazo de presentación para comunicar variaciones y modificaciones censales:

Cuando necesitamos comunicar cualquier cambio o variación de nuestra actividad al censo tenemos un mes de plazo a contar desde el día siguiente al que se han producido dichos cambios.

-Plazo de presentación para comunicar la baja en el censo tributario:

Las personas físicas que cesen su actividad empresarial deberán presentar la declaración de baja en el plazo de un mes desde que se produce el cese.

En el caso de las personas jurídicas, cuando éstas se disuelvan, la declaración de baja deberá presentarse en el plazo de un mes desde que se haya realizado la cancelación efectiva de los correspondientes asientos en el Registro Mercantil.

En caso de que fallezca el ‘obligado tributario’ y haya que presentar la declaración censal de baja o comunicar la modificación de la titularidad de los derechos y obligaciones con trascendencia tributaria vigentes con terceros, el plazo es de seis meses desde el fallecimiento.

 


lunes, 19 de junio de 2017

¿Gran empresa o empresa grande?

Recientemente me he encontrado ante una situación que quiero compartir. Habitualmente hablamos de “Gran Empresa” cuando tenemos delante a una organización con una facturación relativa y absoluta de cierto volumen, con un número de empleados considerable, con una estrategia de comunicación que le reporta notoriedad, con una gestión planificada de entrada de nuevos miembros…

Desde mi punto de vista, en términos futbolísticos, hablamos de un gran club cuando, entre otros indicadores, realiza unos fichajes espectaculares (en nombre y en euros), realiza megapresentaciones de éstos, además de favorecer al máximo la adaptación del futbolista a la ciudad, club… Sin embargo, cuando acaba la temporada y, por distintas razones, se prescinde o se marchan varios de estos “cracks”, bien por que no han aportado lo esperado, bien por que han llegado al final de la vida deportiva o bien por que han encontrado otro club más acorde a sus pretensiones profesionales, muy pocos de estos grandes clubs realizan una operación salida a la altura de lo que estos futbolistas merecen por su dedicación, esfuerzo, aportación… Básicamente el club se ciñe a una nota de prensa de un par de párrafos.

Un club de fútbol con este comportamiento es un “Club Grande”, que dista mucho de ser un “Gran Club”, con la misma profesionalidad presentando nuevos miembros como anunciando las bajas (voluntarias o involuntarias), entre otras cosas.

Volviendo al ámbito empresarial, nos encontramos con idéntica situación e igualmente opino que estaríamos ante una “Empresa Grande” y no una “Gran Empresa”.

En el caso que quería compartir, en un entorno teórico de una “Gran Empresa”, con un trato humano próximo, etc… tras algo más de 7 años  desarrollando las tareas y funciones que ha demandado la organización (ni más ni menos), cuando se decide voluntariamente “abandonar el barco” para emprender un nuevo proyecto mucho más motivador personal y profesionalmente, la despedida oficial (pública) ha sido un e-mail de una línea, remitido sólo a los miembros de la mesa de al lado (ni siquiera a toda la organización), indicando que esta persona se marcha por voluntad propia (sin mención expresa al deseo que todo vaya muy bien, aunque sea por formalidad).

Estaréis conmigo que esta actitud es la de una empresa grande y no la de una gran empresa.

Como alguna vez me habréis escuchado y/o leído, el movimiento se demuestra andando.